Así se previene el síndrome del ojo seco

¿Pasas mucho tiempo ante las pantallas?, ¿eres mujer y has pasado la menopausia? Lee este artículo para saber cómo se previene el síndrome del ojo seco, un trastorno que te puede afectar.

El síndrome del ojo seco es un problema que puede prevenirse. Con el ojo seco estamos ante una alteración de la superficie ocular que se origina por la falta de producción de lágrima o por una lágrima de poca calidad, que se evapora rápidamente lo que hace que el ojo no este adecuadamente lubricado. Sufrir este trastorno ocular hace que tengas tres veces más dificultades para realizar tareas cotidianas, como leer, conducir, trabajar con el ordenador o ver la televisión.

Irritación, sensibilidad a la luz, escozor, enrojecimiento, sensación de cuerpo extraño o arenilla en el ojo, problemas para leer, además de fatiga o pesadez en los párpados son alguno de los síntomas que indican que la salud ocular no es la correcta se debería consultar con tu oftalmólogo o con tu optometrista para confirmar que sufres de síndrome del ojo seco.

La detección y el tratamiento precoz son esenciales para la mejora de la salud ocular y ahí es donde estos profesionales te pueden ayudar. En el caso del síndrome del ojo seco es importante dicha detección para evitar los trastornos y el malestar que puede causar, especialmente en personas mayores y mujeres en fases de cambio hormonal, que son los colectivos de más riesgo, aunque cualquiera puede verse afectado.

Las causas más comunes de sufrir este trastorno son:

• La disminución de la secreción lagrimal debido a la edad.
• Cambios hormonales en las mujeres.
• Factores ambientales como aires acondicionados, calefacción, etc.
• Lectura prolongada, porque se reduce el parpadeo y la lágrima no se distribuye correctamente.
• Enfermedades como el síndrome de Siögren o la artritis reumatoide, así como enfermedades cicatrizantes de la superficie ocular.
• Uso de lentes de contacto.
• Algunos procedimientos quirúrgicos de oftalmología.

Aunque el síndrome del ojo seco no es grave, suele ser una molestia pero no provoca la pérdida de visión. No hay que descuidar la salud ocular, ya que en casos graves este trastorno puede dañar o infectar la córnea. Por lo tanto si tienes alguno de estos síntomas, o estás en uno de los colectivos de riesgo, lo mejor es hacerse unos exámenes y seguir un tratamiento.

Los exámenes que se realizan van encaminados a medir la agudeza visual, así como a analizar la película lagrimal y la producción y concentración de lágrima. Por lo que respecta al tratamiento, lo habitual es el uso de lágrimas artificiales, que recubren y mantienen el ojo en mejores condiciones.

Otros tratamientos que se pueden aplicar son los colirios de suero del propio paciente, prescribir medicamentos o incluso la intervención quirúrgica si fuera necesario. Todo ello bajo el control del especialista en salud ocular.

Además, debes seguir una serie de consejos para evitar las molestias porque así se previene el síndrome del ojo seco:

• Cuando estés delante del ordenador sitúate correctamente y descansa la vista de vez en cuando.
• Parpadea a propósito más a menudo.
• Evita la sequedad ambiental mediante el uso de humidificadores.
• Protégete de la polución ambiental, así como del polvo doméstico, el humo del tabaco o los disolventes.
• Limpia regularmente las pestañas y aplica compresas calientes en los ojos.
• Sigue una dieta rica en omega 3 y baja en omega 6. El equilibrio nutricional es fundamental para la salud ocular.

En Alcocer Óptico realizamos exámenes de sequedad ocular, por eso, si tienes alguno de los síntomas que hemos citado antes, concierta una cita y ven a vernos. Podemos ayudarte a mejorar los síntomas del ojo seco.